La popular compañía informática Intel prepara ya un procesador de muy bajo consumo para teléfonos móviles y tabletas electrónicas. Este incorporará una tecnología de 32 nanómetros con la cual pretende arrebatar el liderazgo a ARM, la arquitectura que se esconde en el corazón de cada teléfono móvil inteligente (smartphone).
El nuevo mercado de los iPhones, iPads, “Androides” y demás, está afectando cada vez más al gigante de Santa Clara, y es por eso que han decidido competir en este sector con este nuevo procesador que podría sumar al mercado millones de smartphones y tablets más potentes que las que están en él actualmente.
El nombre de esta gama de procesadores será Medfield, y esta primera generación llegará a principios de 2012. La gama todavía está en proceso, y cuenta con el apoyo de Google, que se ha comprometido a desarrollar una versión de Android compatible con procesadores X86.